viernes, 28 de marzo de 2014

LOS MANIFIESTOS DE FERNANDO TÁVORA. TRES PROYECTOS PARA UNA SÍNTESIS. JUAN ANTONIO ORTIZ ORUETA




Los manifiestos de Fernando Távora. Tres proyectos para una síntesis. Bajo este título, Juan Antonio Ortiz Orueta, arquitecto y miembro del grupo, dará una conferencia el próximo miércoles 2 de abril, dentro de nuestro ciclo de divulgación e investigación.

En esta ocasión contaremos con la participación de Manuel Mendes, doctor arquitecto, profesor de la Faculdade de Arquitectura da Universidade do Porto, codirector junto con Miguel Martínez Garrido, director de nuestro grupo de investigación, de la tesis doctoral en curso de Juan Antonio Ortiz Orueta.

La ponencia tendrá lugar en el aula 2S1, pabellón antiguo, ETSAM, a las 17:30 horas.











Abstract de la tesis doctoral de Juan Antonio Ortíz Orueta


Unos años después de su juvenil manifiesto teórico O problema da Casa Portuguesa, en 1951, el arquitecto obtiene el CODA con el proyecto fin de carrera de la Casa sobre o mar, que constituye lo que podríamos considerar su manifiesto previo, el paso de la teoría a la práctica, que anuncia por donde iría a discurrir su trayectoria profesional. Al final de esta década, una etapa de grandes convicciones y obras destacadas, el Pavilhão de Ténis viene a constituir un manifiesto de confirmación que, con su manera de disponerse en la Quinta da Conceição anticipa su otro gran manifiesto teórico, Da organização do espaço. Por último, el Memorial de la ciudad de Oporto, la Casa dos 24, al final de su vida profesional, se convierte en su manifiesto final, su canto del cisne, en el que, a partir de una valiente rehabilitación, la torre se configura como un mecanismo que organiza el espacio en torno a la Sé.

Estos tres manifiestos proyectuales, entrelazados con los teóricos, nos permiten dotar de contenido aquella proclamación aparentemente pretenciosa del propio arquitecto: «eu sou a Arquitectura Portuguesa». Como su admirado Pessoa al modelar su heteronimia - «serei eu próprio toda uma literatura»-, con la consagración de la Escuela de Oporto y de la Trilogía Távora, Siza y Souto de Moura, el maestro pudo ver cumplido su sueño vital, aquella misión que a sí mismo se había encomendado: la causa de una nueva arquitectura portuguesa, no concebida como un estilo, sino como una manera de hacer, una síntesis integradora de diferentes narrativas.













 

No hay comentarios:

Publicar un comentario